Vorbrog
A simple vista, Vorbrog parece un planeta estéril: llanuras abrasadas por el sol, cañones interminables y valles pedregosos donde el viento levanta tormentas de arena constantes. Sin embargo, bajo esa superficie inhóspita se oculta un ecosistema resiliente y de gran interés para la exploración. Hierbas resistentes, arbustos fibrosos y árboles de raíces profundas han evolucionado para extraer agua de las capas subterráneas, generando una sorprendente variedad de vegetación en apariencia desértica.
Recursos y ecología
Las plantas de Vorbrog han despertado un enorme interés entre las corporaciones, ya que muchas poseen propiedades medicinales y bioquímicas únicas. Algunas segregan resinas utilizadas en compuestos farmacéuticos; otras producen fibras de xenocelulosa de gran calidad, esenciales para biopolímeros industriales.
El subsuelo alberga vetas accesibles de cobre bruto y ferrita, así como bolsas de silicato que las corporaciones refinan en cristal resonante. No es el mundo más rico en minerales, pero la combinación de biomasa y metales lo convierte en un enclave estratégico.
Colonización y tensiones
Pequeñas colonias mineras y bases científicas, financiadas por AISER y Renivit, se extienden por los cañones y valles donde el agua aflora a la superficie. Estos enclaves son frágiles: dependen de sistemas de reciclaje y de un delicado equilibrio ecológico que cualquier explotación excesiva podría romper. La tensión entre explotación y preservación es constante, y grupos ecologistas radicales han saboteado en varias ocasiones maquinaria de extracción.
Vida salvaje
Los valles y oasis de Vorbrog albergan fauna adaptada al calor extremo: reptiles blindados, aves carroñeras de alas enormes y pequeños mamíferos nocturnos que se alimentan de la vegetación. En las cavernas más profundas, algunos colonos han reportado encuentros con criaturas anfibias de piel traslúcida, cuya existencia aún no ha sido confirmada por estudios oficiales.
El planeta escondido
Para la mayoría del Sistema Omega, Vorbrog es un mundo menor, un punto en el borde exterior sin gran relevancia. Pero para quienes trabajan en él, representa una mina viva de posibilidades: un lugar donde ciencia y codicia chocan a diario, y donde cada descubrimiento vegetal o mineral puede cambiar el rumbo de una corporación. Su fragilidad lo hace un planeta en equilibrio precario: un paso en falso, y Vorbrog podría pasar de vergel oculto a desierto absoluto.